Aprenda cómo hacer un rosário en casa

La palabra Rosario significa ‘Corona de Rosas’. Es una antigua devoción católica que la Virgen María reveló que cada vez que se reza un Ave María se le da una rosa y por cada Rosario completo se le da una corona de rosas.

La rosa es la reina de las flores, por lo que el rosario de todas las devociones es considerado el más importante.

Rezar el Rosario es una práctica religiosa de devoción mariana muy extendida entre los católicos romanos, que lo rezan tanto en público como individualmente.

Consiste en la recitación en serie de oraciones con la ayuda de una cadena con cuentas o nudos, que recibe el mismo nombre.

El Rosario se divide tradicionalmente en tres partes iguales, con cincuenta cuentas cada una, que, por corresponder a la tercera parte, se llamaban el Rosario.

Cada tercio comprende un conjunto especial de tres Misterios: los Misterios Alegres, los Misterios Dolorosos y los Misterios Gloriosos.

Hoy aprenderás a hacer tu rosario.

Elija los suministros. Un tercio está compuesto por un crucifijo, 53 cuentas de un color para representar las oraciones del «Ave María» y 6 cuentas de otro color para representar las oraciones del «Padre Nuestro».

El crucifijo y las cuentas están atadas en un patrón en una cuerda o hilo fuerte.

• Las tiendas de material religioso venden pequeños crucifijos adecuados para hacer rosarios. Normalmente también venden cuentas que puedes usar para representar a los Ave Marías y a los Padres.
• Es común usar hilo de nylon encerado para hacer rosarios. Elija un hilo que pase a través de las cuentas que ha elegido. Deberían encajar fácilmente en el hilo, pero no deberían aflojarse demasiado. Necesitarás unos tres pies.

Organizar las cuentas.

Los rosarios se dividen en cinco «decenas», secciones que contienen diez cuentas de Avemarías, así como una sección más pequeña con tres esferas más.

Dividir las cuentas del Ave María en cinco grupos de diez y un grupo de tres. Coloca las cuentas del Padre Nuestro en una pila separada.

Prepara el cable del rosario.

Utiliza una regla y un bolígrafo para marcar el alambre con un punto a unos 6 cm del extremo. Haz un nudo en la punta para comenzar el rosario.

El nudo debe ser lo suficientemente grande como para evitar que las cuentas se deslicen al otro lado del cordón.

Pasa 10 cuentas de Ave Marías al final del cable. Comprueba que se acumulen al final y no pasen el nudo. Haz un segundo nudo al final del cable.

• Deje espacio para que las cuentas se deslicen, pero no mucho. Cuando se usa el rosario, la persona debe poder deslizar las cuentas ligeramente hacia abajo mientras completa cada oración.
• Si necesitas ayuda para hacer un nudo en un lugar determinado, prueba este truco: haz un nudo suelto en el lugar donde quieras apretarlo. Coloca un palillo sobre el alambre donde el nudo debe ir. Entonces tira de él con firmeza y quita el palillo.

Ponga una cuenta de Nuestro Padre después del segundo nudo. Este billete debería tener un color diferente al del Ave María ya atado.

Haz otro nudo justo después del Padre Nuestro.

Sigue atando otras cuatro docenas. Después de hacer un nudo después del primer Padre Nuestro, pasa otras 10 cuentas de Ave María. Ata un nudo, coloca una cuenta de Padre Nuestro, haz otro nudo y pasa 10 cuentas de Ave María más.

Continúe hasta que haya atado las 5 docenas, con la excepción del último Padrenuestro. Termina con un nudo después de la última serie de 10 cuentas de Ave María.

Coloca los últimos tres Ave Marías. Haz otro nudo para mantener esas cuentas en su lugar.

Añade el crucifijo. Átala firmemente con un doble nudo después de haberla atado al rosario.

Use esmalte ligero o pegamento para asegurar que el nudo permanezca en su lugar. Corta el cable suelto que cuelga del nudo.

Es costumbre pedir a un sacerdote que bendiga el rosario antes de usarlo para rezar. Lleve el rosario a su parroquia y pídale al sacerdote que lo bendiga.

Entonces usa el rosario o dónalo.